Cuando las compañías colocan la inteligencia artificial en el centro de sus negocios, además de una pléyade de oportunidades un conjunto de riesgos que podrían derivar en robos de datos, interrupciones del negocio o -en algunos casos- daños a las personas comienzan a florecer. ¿Tendría sentido una nueva generación de seguros que cubrieran a las empresas de estos emergentes riesgos digitales?
Incluso cuando las empresas están facultadas para abordar los posibles fallos de la IA, es importante reconocer que es más difícil ser el defensor que el atacante, ya que el primero debe protegerse contra todos los escenarios posibles, mientras que el segundo solo necesita encontrar una debilidad para explotar.
En este artículo de Harvard Business Review, Ram Shankar Siva Kumar y Frank Nagle reflexionan sobre la necesidad y oportunidad de este tipo de nuevas pólizas que limiten la responsabilidad de los fabricantes y programadores de IA, y a la vez protejan a sus usuarios, sean conscientes o no de serlo. #digitalEconomyRocks